
La Catedral Innova | Hace 5 meses
Dos décadas después del nacimiento de Internet visionarios y investigadores de todo el mundo enfocan su mirada hacía el futuro. ¿Cómo será la Red la próxima década?
Para Nova Spivack, gurú y pionero de Internet, tras la Web 2.0, que se ha centrado en la cara visible de la Red, en su usabilidad y en hacerla más interactiva y más social, el desarrollo de la Internet del futuro vuelve a centrarse en la infraestructura. Así, la Web 3.0 o Internet inteligente necesita reestructurar su esqueleto con nuevas tecnologías y protocolos capaces de soportar las características avanzadas de los navegadores y aplicaciones del futuro.
Inteligencia artificial a un clic
Aunque tenemos la sensación de que Google, el buscador número uno, tiene respuesta para todo, los motores de búsqueda escanean un porcentaje muy bajo de todo lo que existe en la Red y además son incapaces de establecer relaciones entre los contenidos.
Ante las limitaciones actuales de Internet para manejar un volumen de datos e información inalcanzable y en constante crecimiento, ahora el objetivo prioritario es desarrollar nuevas tecnologías de ordenación y clasificación, avanzar en la denominada Web semántica. Para uno de sus principales impulsores, Tim Berners-Lee, si se consigue convertir la información en conocimiento, Internet puede llegar a ser una herramienta inteligente y revolucionaria. Así las cosas, la Web semántica se basará en la inclusión mediante complejas tecnologías de etiquetación de metadatos que permitan la conexión de significados y la interacción de toda clase de dispositivos y plataformas.
Etiquetar todo el conocimiento es un reto enorme, casi inalcanzable, que debe enfrentarse a numerosas dificultades. Si establecer estándares tecnológicos nunca es un fácil (todas las empresas quieren su trocito del pastel), cuando hablamos de conocimiento, de información, la tarea parece imposible. Los que la controlan no parecen dispuestos a dejar de lado sus privilegios en beneficio del progreso común. Además, se necesitaran procesadores más potentes y un ancho de banda mayor para procesar tal cantidad de datos.
Internet en cualquier lugar
Aunque denominaciones como Web 2.0 o Web 3.0 intentan marcar un antes y un después determinado, lo cierto es que la evolución de Internet es constante y actualmente ya es posible disfrutar de características de un Internet inteligente.
La accesibilidad a la Red de redes desde cada vez más dispositivos y la capacidad de conectar cualquier aparato a la Web ya no es cosa del futuro. No se trata tan sólo de acceder fácilmente a una gran cantidad de información cada vez más personalizable, sino de poder acceder desde cualquier lugar.
Las actuales investigaciones nos conducen a un Internet que debería alcanzar, esta vez sí, el sueño de un conocimiento universal accesible para toda la humanidad.
Imagen: CC lepiaf.geo (lost in translation)
Dos décadas después del nacimiento de Internet visionarios y investigadores de todo el mundo enfocan su mirada hacía el futuro. ¿Cómo será la Red la próxima década?
Para Nova Spivack, gurú y pionero de Internet, tras la Web 2.0, que se ha centrado en la cara visible de la Red, en su usabilidad y en hacerla más interactiva y más social, el desarrollo de la Internet del futuro vuelve a centrarse en la infraestructura. Así, la Web 3.0 o Internet inteligente necesita reestructurar su esqueleto con nuevas tecnologías y protocolos capaces de soportar las características avanzadas de los navegadores y aplicaciones del futuro.
Inteligencia artificial a un clic
Aunque tenemos la sensación de que Google, el buscador número uno, tiene respuesta para todo, los motores de búsqueda escanean un porcentaje muy bajo de todo lo que existe en la Red y además son incapaces de establecer relaciones entre los contenidos.
Ante las limitaciones actuales de Internet para manejar un volumen de datos e información inalcanzable y en constante crecimiento, ahora el objetivo prioritario es desarrollar nuevas tecnologías de ordenación y clasificación, avanzar en la denominada Web semántica. Para uno de sus principales impulsores, Tim Berners-Lee, si se consigue convertir la información en conocimiento, Internet puede llegar a ser una herramienta inteligente y revolucionaria. Así las cosas, la Web semántica se basará en la inclusión mediante complejas tecnologías de etiquetación de metadatos que permitan la conexión de significados y la interacción de toda clase de dispositivos y plataformas.
Etiquetar todo el conocimiento es un reto enorme, casi inalcanzable, que debe enfrentarse a numerosas dificultades. Si establecer estándares tecnológicos nunca es un fácil (todas las empresas quieren su trocito del pastel), cuando hablamos de conocimiento, de información, la tarea parece imposible. Los que la controlan no parecen dispuestos a dejar de lado sus privilegios en beneficio del progreso común. Además, se necesitaran procesadores más potentes y un ancho de banda mayor para procesar tal cantidad de datos.
Internet en cualquier lugar
Aunque denominaciones como Web 2.0 o Web 3.0 intentan marcar un antes y un después determinado, lo cierto es que la evolución de Internet es constante y actualmente ya es posible disfrutar de características de un Internet inteligente.
La accesibilidad a la Red de redes desde cada vez más dispositivos y la capacidad de conectar cualquier aparato a la Web ya no es cosa del futuro. No se trata tan sólo de acceder fácilmente a una gran cantidad de información cada vez más personalizable, sino de poder acceder desde cualquier lugar.
Las actuales investigaciones nos conducen a un Internet que debería alcanzar, esta vez sí, el sueño de un conocimiento universal accesible para toda la humanidad.
Imagen: CC lepiaf.geo (lost in translation)